Tras las décadas de 1970 y 1980, prosigue el proceso del reconocimiento de los derechos de los Pueblos Indígenas. Por ejemplo, se propone crear un foro permanente sobre cuestiones indígenas. Esta idea nace durante la Conferencia Mundial de Viena sobre los Derechos Humanos, celebrada en 1993. Su establecimiento se convierte en uno de los objetivos centrales del programa de actividades del Decenio internacional de los Pueblos Indígenas (1995-2004). Se ponen en funcionamiento dos talleres para dirimir la posibilidad de crear un foro permanente. El primero tiene lugar en Copenhague (Dinamarca) en 1995 (ver informe E/CN.4/Sub.2/AC.4/1995/7), y el segundo en Santiago de Chile en 1997.
En febrero de 1999, un grupo de trabajo ad hoc de la Comisión de los Derechos Humanos se reúne en Ginebra para elaborar propuestas para crear el foro. Un segundo grupo de trabajo ad hoc se reúne el año siguiente, en febrero de 2000, para elaborar una propuesta para la Comisión de los Derechos Humanos. En el transcurso de su 56ª sesión, la Comisión recomienda al Consejo Económico y Social (ECOSOC) la creación de un foro permanente sobre las cuestiones indígenas. El 28 de julio de 2000, ECOSOC adopta una resolución que establece el Foro Permanente para las Cuestiones indígenas (UNPFII). Posteriormente se propone la creación del Mecanismo de Expertos sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (MEDPI), el cual ve la luz el 14 de diciembre de 2007, tras la resolución A/HRC/6/36 del Consejo de los Derechos Humanos (CDH). El MEDPI remplaza al Grupo de Trabajo sobre Poblaciones Indígenas (GTPI) de la antigua Subcomisión de Promoción y Protección de los Derechos Humanos.
Otro momento importante a nivel internacional es el establecimiento del Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas para los Pueblos Indígenas. Este fondo nace tras la resolución de la Asamblea General 40/131 del 13 de diciembre de 1985. Tiene como objetivo aportar asistencia financiera a los delegados indígenas que desean participar en los debates del Grupo de Trabajo sobre las Poblaciones Indígenas de la Subcomisión de Promoción y Protección de los Derechos Humanos. En 2001, la Asamblea General decide extender su mandato (resolución 56/140) para que los delegados indígenas puedan participar en el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas. En la resolución 63/161 se extiende al Mecanismo de Expertos sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y, en la resolución 65/198 del 21 de diciembre de 2010 se extiende también a las sesiones del Consejo de los Derechos Humanos y los órganos de los tratados sobre los derechos humanos.
En 2001 surge la idea de que la Comisión de los Derechos Humanos cree el cargo de Relator Especial de los derechos de los pueblos indígenas. De conformidad con la resolución A/HRC/6/L.26 del 24 de septiembre de 2007 presentada por Guatemala, el Consejo renueva el mandato del Relator Especial sobre la situación de los derechos humanos y de las libertades fundamentales de los indígenas. Tras la decimoquinta sesión del Consejo del 20 de septiembre de 2010, este aprueba sin votación una resolución que modifica su denominación a "Relator Especial ante las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas", un mandato a cargo actualmente de Doña Victoria Tauli Corpuz.
Posteriormente, y tras más de 30 años de debates y de trabajo, el proyecto de creación de una declaración sobre los derechos de los pueblos indígenas se convierte en realidad. El 29 de junio de 2006, el Consejo de los Derechos Humanos adopta la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, y la Asamblea General aprueba este texto normativo internacional el 13 de septiembre de 2007. Si bien la declaración no es de carácter vinculante, contiene los principios generales para la promoción y la defensa de los derechos de los pueblos indígenas.
Por último, destaca también como acontecimiento clave la celebración de la primera Conferencia Mundial sobre los Pueblos Indígenas, que tuvo lugar el 22 de septiembre de 2014 en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. Se trata de una conferencia de dos días de duración con los Estados miembros y los pueblos indígenas. La celebración de esta conferencia se decidió el 16 de noviembre de 2010 a raíz de la tercera comisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas (resolución A/C.3/65/L.22/Rev.1). Se trata de una sesión plenaria de alto nivel de la Asamblea General. Los delegados indígenas de siete regiones del mundo se prepararon a conciencia para la conferencia. Se celebró una reunión en junio de 2013 en Alta (Noruega) con el fin de establecer una postura común. Como resultado surgió el "Documento final de Alta", el cual formula recomendaciones a los Estados. La iniciativa de esta reunión surgió del Parlamento Sami de Noruega.